El modelo de vigilancia del Covid-19 se modifica ya partir de ahora, los positivos asintomáticos no tendrán que aislarse, tampoco si su sintomatología es leve.
En todo caso, sí que tendrán que llevar obligatoriamente mascarilla quirúrgica o FFP2 durante los diez días posteriores a la detección del positivo, tendrán que minimizar la actividad social y sus contactos deberán realizarse un test rápido de antígenos (TRA) .
Esta nueva flexibilización de las medidas será, según el ministro portavoz Eric Jover, a criterio propio. Es decir, que las personas tendrán que valorar ellas mismas cuál es su estado de salud. La intención es gripalizar a la Covid-19. «Hemos visto que el impacto de la Covid en las infraestructuras sanitarias ha disminuido mucho y seguramente podremos irla gripalizando». Jover también recomienda que se haga teletrabajo en la medida de lo posible.
El cambio de protocolo implica también que las bajas por Covid ya no serán automáticas. Sólo se darán a través de la vía preferente a aquellas personas en las que la sintomatología sí sea incapacitante.
En referencia al número de contagios, se han detectado 322 en la última semana, una cifra inferior a los registrados últimamente. El número de activos también se ha reducido de 662 a 560 casos. Las altas se sitúan en 424. Los contagios totales desde el inicio de la pandemia fueron 42.894.
En cuanto a las hospitalizaciones, permanecen ingresadas en planta dos personas. La Unidad de Cuidados Intensivos se mantiene sin enfermos con coronavirus SARS-CoV-2. En las escuelas, ningún aula está en vigilancia activa o vigilancia pasiva.
En el ámbito sociosanitario, los residentes sólo tendrán que llevar mascarilla en los espacios interiores cuando reciban visitas externas o cuando la situación del centro lo requiera, como puede ser la aparición de un brote.
En definitiva, los positivos asintomáticos no tendrán que aislarse, pero si han de llevar las mascarillas quirúrgicas o las mascarillas FFP2.